Es muy habitual en trading pasar por fases de acumulación en los gráficos. Las fases de acumulación hacen referencia a períodos en los que el precio se encuentra completamente lateralizado. Cuando esto ocurre, lo más sensato es mantenernos al margen de realizar cualquier tipo de operativa. Quiero destacar, por otro lado, que cuando un mercado no marca una clara imposición alcista o bajista en un momento determinado y aun así decidimos entrar, los riesgos de que esa entrada salga mal son demasiado elevados, y si decidimos operar de esta manera se hará mucho más complicado el poder llegar a tener una estrategia consistente.
Por ese motivo, es importante trabajar muy a fondo la parte psicológica y evitar ese tipo de impulsos que nos llevan a entrar de manera irracional. Si no lo vemos claro, si no operamos con lógica, es mejor mantenernos al margen, por muchas ganas que podamos llegar a tener de empezar a recoger beneficio, ya que solo por entrar antes no tenemos garantizado ganar más, si no más bien todo lo contrario: así corremos el riesgo de que finalmente no se dé la confirmación que estábamos buscando, el precio se vaya en nuestra contra, y terminemos perdiendo la entrada.
También tengo que destacar que cuanto más tiempo se lleva formando una fase de acumulación, la ruptura y posterior movimiento que se esperan son mucho más fuertes que si la lateralización se mantiene por poco tiempo. Es por eso que necesitamos estudiar al detalle cuál es la naturaleza de esa lateralización por la que atraviesa el activo, para esperar qué movimiento podría formarse y, en el momento en que llegue la confirmación, poder entrar con mayor seguridad.
Necesitamos armarnos de paciencia para entrar en este tipo de situaciones. Nos sorprendería saber cuánto podemos aumentar la rentabilidad de nuestra cuenta de trading si trabajamos de esta manera, todo es cuestión de esperar siempre el momento apropiado. En muchos casos la lateralización es debida a que estamos esperando a la publicación de una noticia importante. Pues bien, si este es nuestro caso, es mejor esperar a conocer los resultados finales y operar con la reacción posterior del mercado, nunca antes. Si tratamos de adelantarnos o adivinar lo que puede ocurrir y entrar antes de tiempo, estaremos atrapados, ya que no podemos dar por hecho, nunca, determinados movimientos del mercado.
Es probable que muchos de los que estáis leyendo este artículo hayáis pasado por esta circunstancia y hayáis podido comprobar que la paciencia y la espera de una confirmación es clave para poder operar correctamente y no tener que lamentar después el haber entrado en un momento que no era adecuado y tener que asumir una pérdida que sabemos que se ha cometido por no hacer bien las cosas desde el principio.