Los Ángeles Caídos son bonos que alguna vez tuvieron una calificación crediticia de grado de inversión (Investment Grade, IG), pero que han sido degradados a bonos de alto rendimiento o "bonos basura" (High Yield, HY). Estos bonos se caracterizan por tener un mayor riesgo debido a su probabilidad de incumplimiento, lo que también significa que ofrecen una tasa de cupón más alta.
En este artículo, revisaremos el ETF VanEck Fallen Angel High Yield Bond (ANGL), un fondo que invierte en este tipo de bonos, y veremos en qué carteras puede ser útil y cuándo sería un buen momento para considerarlo. Además, detallaremos sus características, rentabilidad, riesgos y cómo integrarlo en distintas estrategias de inversión.
¿Qué son los Fallen Angels o Ángeles caídos?
Características de los Fallen Angels
Los bonos conocidos como Ángeles Caídos tienen un mayor potencial de apreciación y un cupón más alto que otros bonos basura, pero presentan un riesgo menor. Además, su retorno histórico ha sido superior al de los bonos de alto rendimiento (HY), aunque con una mayor volatilidad. Esto los convierte en una alternativa interesante para los inversionistas que buscan un equilibrio entre riesgo y rendimiento.
Una de las razones por las que estos bonos pueden resultar atractivos es que, a pesar de su degradación, existe la posibilidad de que recuperen su grado de inversión original. Esto podría llevar a una revalorización significativa. Además, han demostrado un buen desempeño en entornos de tasas de interés en aumento, lo que es relevante en el contexto actual de posibles subidas de tasas en Estados Unidos.
ETF VanEck Fallen Angel High Yield Bond (ANGL)
El VanEck Fallen Angel High Yield Bond ETF (ANGL) busca replicar el índice ICE US Fallen Angel High Yield 10% Constrained, que sigue bonos emitidos en dólares estadounidenses que fueron degradados de su calificación original de grado de inversión. El fondo utiliza un método de réplica física optimizada y pondera por capitalización, con una política de dividendos de distribución mensual.
En los últimos 12 meses, el ETF ha ofrecido un cupón promedio del 5,65%, con una duración promedio de 5,27 años y una maduración promedio de 10,81 años. Estas características son importantes ya que, al ser originalmente bonos de grado de inversión, tienden a tener una duración más larga que otros bonos HY, lo que implica una mayor sensibilidad a los cambios en las tasas de interés.
Desempeño y riesgos del ETF ANGL
El ETF ANGL ha mostrado un mejor desempeño en comparación con otros bonos de alto rendimiento, especialmente durante ciclos de subida de tasas de interés. Sin embargo, como cualquier inversión, conlleva ciertos riesgos. El principal es el riesgo crediticio, ya que estos bonos fueron degradados por una razón y podrían incumplir en el pago de su deuda.
Además, una mayor duración implica que su precio puede ser más sensible a las subidas de tasas de interés, y existe la posibilidad de que el "premium" pagado por estos bonos debido a la expectativa de que recuperen su grado de inversión no se materialice.
Estrategias para utilizar el VanEck Fallen Angel High Yield Bond ETF
Este ETF no es recomendable para carteras indexadas pasivas cuyo objetivo principal sea la amortiguación en tiempos de crisis. Sin embargo, puede ser útil en estrategias global Macro o top-down, donde se espera una mejora en las condiciones económicas o un recorte de tasas. También puede ser una opción para estrategias de rentas periódicas, especialmente cuando los instrumentos de renta fija de grado de inversión ofrecen un cupón más bajo del que se necesita.
Finalmente, para los inversionistas individuales que desean tener exposición a este nicho de mercado, los ETFs como ANGL son la mejor alternativa, ya que armar una cartera de bonos ángeles caídos comprando individualmente cada bono sería complicado y costoso